No es ningún secreto que los equipos de oxígeno deben mantenerse limpios y libres de grasa y suciedad.

La limpieza no es solo necesaria en tu casa. Eso está claro. También vale por los equipos de exígeno.

Bien atento que esto vale por todos.

Esto no sólo ayuda a que el equipo funcione mejor, sino que también garantiza que su flujo de oxígeno sea seguro y esté libre de contaminación evitando posibles explosiones o accidentes.

Veamos los detalles relacionados con el desengrasado de material según dichos estándares y buenas prácticas.

Problemas del oxígeno con la suciedad

Los sistemas de oxígeno pueden experimentar problemas de suciedad debido a la acumulación de depósitos en las superficies interiores de las tuberías y válvulas.

La causa más común de acumulación de suciedad en los sistemas de oxígeno son las gotas de agua. Pueden formarse cuando se mezcla con la humedad del aire. Estas gotas pueden depositarse en las superficies interiores de las tuberías y válvulas, provocando una acumulación de depósitos de sedimentos.

Otras causas de acumulación de suciedad pueden ser:

  • Polvo
  • Aceites
  • Grasas
  • Otras partículas contaminantes

Estos también pueden acumularse en las superficies interiores y exteriores de las tuberías y válvulas, reduciendo el flujo de oxígeno y aumentando el riesgo de corrosión.

Otro gran problema de contaminantes como los aceites y las grasas es que son inflamables, y pueden ocasionar graves incendios en los sistemas de oxígeno.

Oxígeno inflamable

El oxígeno no es inflamable por sí mismo, pero puede funcionar como el medio principal para propiciar un incendio.

¡Así que muy atentos, que no queremos provocar incendios!

Esto se puede entender fácilmente utilizando el concepto del triángulo de fuego, que explica que un incendio ocurre cuando se combinan 3 elementos:

  • Un combustible, tales como los contaminantes descritos anteriormente.
  • Un oxidante, en este caso oxígeno
  • Una fuente de ignición que puede ser una simple chispa.

¿Por qué desengrasar según ASTM G93?

La norma de desengrase ASTM G93 se aplica a la limpieza los equipos de oxígeno. La norma incluye un proceso que utiliza disolventes y maquinaria especial para eliminar los aceites y otros contaminantes del equipo.

Gracias al desengrasado según ASTM G39, se pueden garantizar la precisión del equipo y la seguridad de la operación. Además, al cumplir con esta norma se garantiza el cumplimiento de los criterios de aceptación de los estándares internacionales de limpieza que incluyen:

  • ASTM G93
  • ISO 15001
  • CGA G-4.1
  • EIGA IGC 33-18
  • SAE ARP 1176
  • MIL-STD-1330D

Comprobación con luz UV

Las pruebas con luz ultravioleta son un proceso habitual utilizado para detectar impurezas y defectos en los sistemas que requiren ser desengrasados.

La luz UV es especialmente útil para detectar contaminación por hidrocarburos, ya que sus partículas se hacen fluorescentes a las longitudes de onda de este tipo de luz.

Esto permite a los técnicos identificar partículas de polvo y pelusas de 50 micrones o más, además de una gran variedad de aceites y grasas.

Nuestro procedimiento de desengrasado a parte del prelavado; lavado con ultrasonidos; lavado con disolvente; enjuague y secado tambien incluye una inspeccion con luz UV.

Servicio de desengrasado de oxígeno

Certificado de desengrasado

El certificado de desengrasado verifica que el equipo de desengrasado de oxígeno se ha limpiado correctamente y es seguro para su uso en un sistema del flujo. El certificado debe incluir la siguiente información.

  • Nombre de la persona que ha realizado el desengrasado
  • Fecha del desengrase
  • Descripción del equipo de desengrasado
  • Resultados de cualquier prueba que se haya realizado en el equipo

En RedFluid ofrecemos el servicio de lavado para oxígeno con certificado de desengrasado como parte de nuestros servicios complementarios.

Envasado unitario sellado de material para oxígeno

El material para oxígeno siempre debe estar envasado y precintado de manera unitaria y etiquetado como material limpio para oxígeno. Nunca instale ni opere material y equipos que no estén certificados como limpios para oxígeno según los estándares mencionados anteriormente.

Grasas especiales compatibles con oxígeno

En este caso hay que tener en cuenta algunos puntos clave. En primer lugar, la grasa debe ser compatible con el oxígeno, lo que significa que no se corroe ni se degrada en presencia de la materia. Además, en segundo lugar, la grasa debe tener un punto de fusión elevado, para que no se derrita a las altas temperaturas asociadas a los sistemas de flujo de oxígeno. Por último, la grasa debe ser capaz de soportar el duro entorno químico presente en los sistemas de flujo de oxígeno.

Y no lo olvides. Si. ecesitas cualquier cosa no dudes en ponerte en contacto con nosotros.